Dénia como ejemplo de lo que no se debe hacer
Lo que sucedió en el pleno y sus horas posteriores no tiene precedentes en la Comunitat Valenciana, pasará a la historia del despropósito urbanístico
El pleno del Ayuntamiento fue realmente extraordinario, pero por polémico, sorprendente y lesivo para la ciudadanía de Dénia, porque la dirección política municipal decidió, incluir en las normas urbanísticas del PGE versión definitiva 2023 que enviar a aprobación de Conselleria, una disposición final que exonera a Conselleria de las altísimas responsabilidades patrimoniales de esta ordenación rupturista e insostenible, recayendo toda la carga indemnizatoria en el pueblo de Dénia.
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Después de votar en el pleno a favor de dicha atrocidad manifiestamente ilegal, y con los únicos votos a favor de los concejales socialistas (con votos nominales gracias a la intervención de GD), y con el agravante de un informe del secretario municipal y la TAG de urbanismo contrario a incluir en el documento dicha cláusula tan lesiva para el pueblo, nos llegó a las pocas horas las sorprendentes declaraciones de la concejala de Urbanismo, negando la mayor, y manifestando abiertamente que no se había votado eso, que la disposición adicional no se había incluido en la documentación por ser lesiva, y que si Conselleria la incluía entonces el Ayuntamiento emprendería acciones legales contra el órgano autonómico. Sin duda, una situación kafkiana.
Pero, ¿qué ha pasado realmente? Pues que, tal y como figura en la documentación actualizada en la página web municipal, la cláusula existe y se ha incluido en las normas urbanísticas de la versión definitiva 2023, vendiendo con ello a los ciudadanos de Dénia a un futuro inquietante, lesivo y pernicioso, todo por conseguir aprobar un sinsentido procedimental y de ordenación urbana antes de elecciones, motivo por el que también han esquivado la obligada exposición pública de 20 días, y es que no llegaban.
Del asunto de Costas mejor no digo nada porque clama al cielo, una traición contra propietarios que podría haberse evitado recurriendo a la comisión territorial de urbanismo de Alicante.
Lo dicho, lo que sucedió en el pleno y sus horas posteriores no tiene precedentes en la Comunitat Valenciana, pasará a la historia del despropósito urbanístico, algo de lo que se hablará durante muchos años en los másters de urbanismo, dejando a Dénia como rídiculo ejemplo de todo lo que no se debe hacer en una tramitación de planeamiento.
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