Un Black Friday descafeinado para el comercio local de Alicante

Descafeinado, desinflado o desvirtuado, así se presenta el Black Friday en la ciudad, a unos días de la jornada que desde hace años da inicio a la campaña de Navidad.

Y es que, aunque las rebajas del último viernes son una tradición foránea, no tardaron en arraigar también en nuestra tierra, con grandes hitos, previos a la pandemia, y un efecto importante en la economía.

Sin embargo, entre las cosas que no han vuelto a la «antigua normalidad» parece que este día de rebajas será también uno de ellas. O al menos así lo aprecian desde las asociaciones de comerciantes, con una campaña que consideran que «va muy lenta».

«Las circunstancias económicas son las que son, el gasto de las familias está influenciado por el aumento de las hipotecas, el coste energético y la inflación», destaca Vicente Armengol de la asociación de comerciantes el Corazón de Alicante.

«Se ha notado que hay menos ventas, está siendo un invierno más flojo que antes de la pandemia, la gente también está esperando al segundo bono comercio», comenta Juan Utrera de la asociación de comerciante Más que Centro.

Pero no solo es una cuestión económica, desde el comercio local también apuntan a que una jornada de descuentos, que como mucho se alargaba al fin de semana, se ha convertido en todo el mes con precios rebajados. Una situación que consideran insostenible en general.

«Cuando la campaña se centraba solo en uno o dos días se dejaba notar, ahora que hay comercios que tienen promociones desde principios de noviembre lo que se está consiguiendo es desvirtuar la campaña», destaca Armengol.

Es una opinión que también comparte desde Más que Centro, «empezó como viernes negro, después alargando hasta el sábado, luego 'black week' y ahora la gente ya hace 'Noviembre negro».

Desde estas asociaciones reclaman que alargar la promoción perjudica especialmente al comercio local, y además insensibiliza al cliente respecto a los descuentos.

«Al final la ganga no es tal ganga, sino que está a un precio que es el que puedes pagar y lo compras. Pedimos a los consumidores que se fijen no solo en los descuentos llamativos sino en la calidad y lo que está comprando«, reclama Armengol. También insiste en que el cliente tiene que apreciar la atención y el asesoramiento que puede tener en el comercio local.

Pero además, desde estas entidades animan a comprar en las tiendas de proximidad por el efecto que tiene en la ciudad y la economía circular que generan. «Si compras en tu barrio redunda en tu barrio, los impuestos se quedan aquí y ayuda al medio ambiente», explica Armengol.

Con este título la asociación de comerciantes Corazón de Alicante ha presentado un spot publicitario con el que busca animar a la compra el las tiendas de toda la vida.

Esta campaña pone el foco en la actualidad para invitar a reflezionar sobre la importancia que adquiere el pequeño comercio, un sector que supone el 12% del PIB en Alicante.

«Es imprescindible resaltar que el impacto positivo de que la compra se realice en locales de proximidad, es muy importante tanto para la ciudad como para la ciudadanía. Destacamos el valor que aportamos al comprador, la cercanía la especialización, el asesoramiento y esa atención personal», ha destacado Armengol.

Temas

• Alicante (Provincia)
• Comercio tradicional