La cinta adhesiva que cuesta 3.000 euros

¿A quién se le ocurriría utilizar una cinta adhesiva de embalaje como pulsera? ¿Quién, más allá de eso, estaría dispuesto a pagar la friolera de 3.000 euros por ella? Si estás pensando en que nadie en su sano juicio lo haría, estás muy equivocado.

La popular marca de moda de lujo Balenciaga vuelve a ser centro de la polémica con el lanzamiento de su nueva pulsera 'Balenciaga Adhesive', una pulsera, literalmente, con forma de cinta de embalaje que cuesta nada más y nada menos que 3.000 euros.

Durante los últimos días, esta pulsera ha sido el hazmerreír en las redes sociales. Infinidad de usuarios se han burlado de la marca francesa de lujo haciendo referencia a lo absurdo que sería gastarse tanto dinero en un producto tan estrafalario.

No obstante, al contrario de lo que se pudiera pensar, la pulsera se ha agotado en la mayoría de joyerías donde se ha expuesto. Este hecho tiene un sentido empresarial muy frecuente en la marca francesa. No es la primera vez que lanzan al mercado un producto extravagante en extremo. Al comercializar una edición muy limitada en unidades, clientes ricos de todo el mundo no dudan en hacerse con un ejemplar, por su exclusividad.

Hace poco, Balenciaga lanzó al mercado una falda que era, literalmente, una toalla de ducha. Costaba 695 euros e Ikea no tardó un lanzar una campaña burlándose de su novedad estilística.

En 2022, la popular marca lanzó un abrigo extremadamente similar al que utiliza el gremio de basureros o la Policía Local. Lo vendían, no es broma, por 2.990 euros.

Analizando todos estos productos, la pulsera en forma de cinta adhesiva por 3.000 euros no parece algo tan descabellado. Lo único que se puede sacar en claro de todo esto, es que todo responde a una estrategia de puro marketing. Y no hay más que ver sus ventas para cerciorarse de ello.

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