El Síndic da un toque a Sanidad por la falta de seguimiento a una paciente de Orihuela derivada a un hospital privado
La usuaria denuncia que no recibió la atención adecuada en el centro ilicitano en el que fue operada: «Me han tratado mal, como si fuese un número»
El Defensor del Pueblo de la Comunitat Valenciana, el Síndic de Greuges, ha emitido una resolución en la que recomienda a la Conselleria de Sanidad extremar los mecanismos de control y seguimiento a aquellos pacientes que son derivados a centros sanitarios privados. La resolución llega después de la queja de una usuaria respecto al trato recibido en un hospital privado de Elche en el que fue operada, y a la que derivaron desde el Hospital Vega Baja de Orihuela como parte del plan de choque para reducir las listas de espera.
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Según expone en su exposición de hechos, la paciente tuvo que volver al centro ilicitano tras las «complicaciones» que asegura se produjeron durante la operación. «Las curas me las tuve que realizar en mi centro de salud ante la desatención del hospital privado», recoge el testimonio.
En una de las visitas al hospital privado, la paciente denuncia que se le hizo esperar hasta cinco horas en una camilla, sin que se le pautara nada ni se le ofreciera «ni siquiera agua»
La afectada consiguió a través del departamento oriolano una nueva prueba -ecografía endoanal- en el centro privado para seguir con el seguimiento de su estado. «Tuve que adelantar la cita urgentemente ya que estaba sangrando y supurando, con un dolor y una incontinencia fecal que estaba deteriorando mi calidad de vida» explica la demandante, situación que habría motivado una nueva intervención quirúrgica.
A pesar de ello, la paciente denuncia la demora de esa intervención, que en el momento de interponer su queja en el Síndic ya era de cinco meses. «Siempre me decían que el cirujano que me operó era externo, y que lamentablemente no se hacían cargo», recoge la exposición de hechos.
En una de las visitas al hospital privado, la paciente denuncia que se le hizo esperar hasta cinco horas en una camilla, sin que se le pautara nada ni se le ofreciera «ni siquiera agua», asegurándole que debía acudir a su hospital de referencia, mientras que en aquel se le comunicaba todo lo contrario. «Me han tratado mal, como si fuese un número», expone.
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Un control tardío
De acuerdo a estos antecedentes, el Síndic reconoce que «no se deprenden actuaciones de seguimiento o control al centro sanitario colaborador» tras la queja interpuesta por la paciente, a pesar de que, como admite Sanidad a través de la resolución, «las complicaciones postquirúrgicas son atendidas habitualmente por el hospital donde se realiza la cirugía» -en este caso, el centro privado de Elche.
El órgano dirigido por Ángel Luna indica que Sanidad solo ha realizado acciones de seguimiento y control al centro colaborador tras la queja emitida por el Síndic, por lo que recomienda a la conselleria dirigida por Marciano Gómez que «extreme al máximo los mecanismos de control» cuando se deriven pacientes a centros privados con tal de garantizar la calidad de la atención prestada en los mismos.
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