El irlandés Nolan da el primer susto en el Hércules
El central pide el cambio por molestias musculares en la única derrota de la pretemporada ante el Águilas (1-0)
El Hércules sufrió anoche en Águilas la primera derrota de la pretemporada en un amistoso sin demasiada historia en el que el conjunto de Rubén Torrecilla puso en evidencia su falta de pegada y acabó sucumbiendo por un penalti en contra. Lo más preocupante del choque fue la lesión muscular de Ryan Nolan.
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El central irlandés pidió el cambio por molestias en la zona de los abductores y está pendiente de pruebas, si bien desde el cuerpo técnico confía en que no haya una rotura, ya que pidió salir del campo en cuenta empezó a sentir dolor.
Nolan es el primer jugador irlandés en la historia del Hércules y pese a su juventud (24 años) ya ha vivido casi todo en el fútbol. Con 16 años fue reclutado por el Inter de Milán y después se quedó a las puertas de debutar en la élite con el Getafe, pero una grtave lesión de rodilla frenó su progresión. El central ha llegado a Alicante procedente del Raith Rovers Football Club de la Scottish Championship y quiere relanzar su carrera y abrirse paso en el fútbol español.
Al margen de las molestias de Nolan, el amistoso en Águilas volvió a poner en evidencia que el cuerpo técnico tratará con la máxima cautela el asunto del canterano Nico Espinosa, ya recuperado de la operación que le hizo perderse la temporada pasada y en la que se le intervino de una cicatriz muscular blanda que provocaba roturas.
Torrecilla no forzará a Nico e incluso está en el aire que llegue a la primera jornada liguera, que tendrá lugar el 2 o 3 de septiembre en el Rico Pérez frente al Espanyol B.
El próximo amistoso del Hércules le medirá este viernes al combinado de la AFE y el nuevo entrenador blanquiazul valora positivamente el trabajo desempeñado por su equipo en esta pretemporada: «Llevamos tres partidos amistosos y me quedo con la manera de competir del equipo: buscamos al rival en campo contrario, ganamos duelos y arriesgamos en la presión. El acierto y la finura llegarán más adelante, en cuanto estemos más rodados».
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