Suma refuerza la lucha contra el fraude fiscal en los tributos locales
La entidad apuesta por nuevas tecnologías, inspección personalizada y colaboración institucional para aflorar ingresos para los ayuntamientos
Suma Gestión Tributaria mantiene la lucha contra el fraude como una de sus prioridades estratégicas para los próximos años. Así lo confirma su CEO, José Antonio Belso, al explicar que esta línea de actuación «se ha convertido en uno de los pilares estratégicos de Suma, especialmente de cara al plan que vamos a desarrollar para el periodo 2026-2030».
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Este organismo, dependiente de la Diputación de Alicante, se encarga de gestionar y recaudar los principales tributos municipales de la provincia. En su actividad diaria trabaja junto a los ayuntamientos para mejorar la eficiencia en la recaudación, asegurar el cumplimiento de las obligaciones fiscales y, en palabras del propio Belso, garantizar que «todos tenemos que hacer frente a nuestras obligaciones tributarias y no quedarnos fuera».
Actividad inspectora
Con ese objetivo, Suma va a intensificar su actividad inspectora en varias figuras impositivas. «En principio, vamos a incrementar nuestra lucha contra el fraude en el Impuesto sobre Construcciones, Instalaciones y Obras (ICIO), que es quizás uno de los impuestos clave en ese aspecto», señala el CEO. Este impuesto grava las actuaciones urbanísticas que requieren licencia, y es uno de los tributos locales con mayor potencial recaudatorio en caso de omisiones.
Junto al ICIO, la entidad también trabaja en otras áreas clave como el Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI), la tasa de recogida de residuos urbanos y el impuesto sobre Actividades Económicas (IAE). Para todas ellas, Suma tiene previsto aplicar nuevas herramientas de análisis y seguimiento. «Vamos a incorporar nuevas tecnologías en materia de detección de omisiones y especialmente esto se puede centrar tanto en el impuesto de bienes inmuebles como en la tasa de recogida de residuos urbanos», afirma Belso.
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La inspección sobre el IAE se centra en comprobar variables como la superficie, el número de trabajadores y la potencia energética instalada. Según explica el máximo responsable de la entidad, se está «verificando la potencia instalada, la superficie de las naves industriales y el personal empleado, manteniendo una base de datos lo más actualizada posible».
Medidas eficaces
La eficacia de estas medidas ya se está notando en los resultados. «El año pasado sobrepasaron los siete millones de euros y este año esperamos crecer un millón más», indica Belso en referencia a los ingresos obtenidos por la unidad de inspección. La previsión a medio plazo es todavía más ambiciosa: «Dentro del plan estratégico que estamos elaborando, esperamos que la unidad sea capaz de generar del orden entre los 18 y 20 millones de euros».
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Una de las áreas de actuación que está ganando protagonismo es la tasa de recogida de residuos urbanos. Este tributo municipal, que debe aplicarse a todos los inmuebles que generan residuos, presenta a menudo situaciones de no tributación. Suma trabaja para identificarlas: «Esperamos que se detecten cerca de 25.000 nuevas altas que hasta ahora no estaban identificadas por los ayuntamientos y les genere 2,2 millones de euros más a los mismos», señala Belso.
Estas actuaciones tienen un doble objetivo: mejorar la equidad tributaria y aumentar los ingresos municipales sin subir impuestos. «Por un lado, uno es de justicia tributaria. Que unos las satisfagan y los otros no genera claramente una cierta desigualdad», defiende el CEO. «Y lo segundo, la oportunidad que nos da de generar nuevos ingresos a las arcas municipales sin incrementar la presión fiscal por parte de los responsables políticos que están al frente de los municipios».
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Ampliar herramientas
El refuerzo de esta estrategia pasa también por ampliar las herramientas operativas de la entidad. Uno de los proyectos que se encuentra en fase de desarrollo prevé mejorar la coordinación con la Agencia Tributaria estatal: «Vamos a extender nuestro trabajo a través de un nuevo proyecto que nos permita una conexión más ágil con la Agencia Tributaria para poder realizar embargos de salarios fuera de nuestro ámbito natural, que es la provincia de Alicante».
Esta medida permitirá actuar con mayor rapidez en casos de impago o retraso. «Acelerará también, ante situaciones no exactamente de fraude sino de retrasos en los pagos, que podamos llevar a cabo unas actuaciones mucho más ágiles», afirma Belso.
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Toda esta estrategia se enmarca dentro del modelo de gestión pública que Suma ha consolidado en la provincia de Alicante, con el objetivo de prestar un servicio eficaz a los ayuntamientos, mejorar la recaudación, y velar por un sistema tributario más justo. El propio Belso resume esa filosofía con claridad: «En el marco de Suma existe una filosofía clara de que todos tenemos que hacer frente a nuestras obligaciones tributarias».
Así, la lucha contra el fraude se presenta como una línea técnica, pero también en clave de política pública para avanzar en justicia fiscal y autonomía municipal, siempre desde una gestión profesional y basada en datos. Y eso, para miles de ciudadanos y ciudadanas de la provincia, se traduce en unos servicios locales más sostenibles, mejor financiados y con reglas del juego más equitativas.
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