Falsifica un poder notarial para vender la vivienda del barrio de Carolinas de donde iba a ser desahuciada

Un desahucio que ha acabado en estafa. Eso es lo que ha ocurrido en el barrio de Carolinas. Allí, una mujer de 58 años de edad residía como inquilina en un piso de la zona, propiedad de un matrimonio argelino. La mujer iba a ser desahuciada este febrero por impagos. Ante esta situación comenzó una estafa para sortear esta situación y, de paso, vender dicho piso.

Según informa la Policía Nacional, el varón instó a la mujer a llevar a cabo la venta de la vivienda, haciéndolo mediante un falso poder notarial argelino, mediante el cual el verdadero propietario conferiría los derechos de la vivienda a nombre de ella. Para ello utilizaron todos los datos del contrato de arrendamiento que poseía la inquilina.

Tras obtener el fraudulento poder notarial, el cual estaba escrito en árabe, contactaron con una inmobiliaria de la zona para ofrecer en venta la vivienda. La agencia se interesó e hizo de intermediaria con clientes para venderla por un total de 66.000 euros, 57.000 euros por el piso y el resto en comisiones.

Tras llevarse a cabo los trámites a través de una notaría con el fin de formalizar un contrato de arras previo, la inmobiliaria realizó un pago de 1.000 euros en efectivo a la presunta estafadora en concepto de reserva de la vivienda. Tan solo una semana después apareció un comprador.

Esta situación hizo que los dos estafadores se personaran en al notaría para llevar a cabo la transacción, siendo todo aparentemente legal y obteniendo la mujer un cheque de 55.290 euros.

La investigación comenzó cuando el perjudicado y legítimo dueño de la vivienda fue conocedor de los hechos, quien fue a la comisaría a denuciarlo. Fueron los agentes de la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) de la Comisaría Provincial de Alicante los que se hicieron cargo de dicho caso.

Los agentes bloquearon inmediatamente el cheque, para evitar la desaparición del dinero. Del mismo modo, la Policía Nacional se puso en contacto con la notaría y la inmobiliaria, quienes desconocían el engaño. De esta manera los agentes se hicieron con una copia del fraudulento poder notarial utilizado.

Tras las gestiones a través de la Embajada General de España en Argelia se constató la falsedad de este documento, puesto que que ni las tasas eran correctas, ni el código de registro de pago que figuraba era el correspondiente, de hecho, ni siquiera las firmas oficiales eran legítimas. Incluso consiguieron contactar con el notario argelino que firmaba el documento, asegurando este que no tenía conocimiento del poder notarial.

Tras todos estos indicios los agentes detuvieron al varón y la mujer de 42 y 58 años respectivamente, ambos argelinos, como presuntos autores de delitos de estafa y falsedad documental y dando conocimiento al juzgado de instrucción en funciones de guardia de Alicante.

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