Bodegas Xaló, la cuna del vino en la Marina Alta
Nacida hace más de 60 años, la cooperativa es un referente en el sector vitícola de la provincia de Alicante y en la Comunitat
Ubicadas en Xaló, un pequeño pueblo de la Marina Alta de poco más de 3.000 habitantes, se encuentran las bodegas bautizadas con el mismo nombre de la localidad que las acoge, las cuales recibirán el Premio Alicantinos 2025 -concedido por este diario- el próximo 19 de noviembre. Rodeado de pequeños bancales a más de 400 metros sobre el mar, se descubre esta cuna del vino alicantino y uno de los referentes del cooperativismo en Alicante y la Comunitat.
Tras más de 60 años, las bodegas de Xaló son una muestra del triunfo del trabajo en equipo de los agricultores de la zona para hacer algunos de los vinos con más personalidad de Alicante. Desde mistelas a tintos, pasando por los vinos blancos de moscatel, la cooperativa de Xaló es la cooperativa vinitícola más importante del norte de la provincia.
Nacida en 1962 tras la agrupación de 14 agricultores de la zona, la bodega capitanea la viticultura de la Marina Alta y ya cuenta con 390 socios, que trabajan en unas 400 hectáreas de viñas, en su mayoría de variedades de Moscatel de Alejandría y Giró. Los dominios de la bodega se enclavan en la zona denominada como 'Vall de Pop', que aglutina los municipios de Parcent, Alcalalí, Llíber, Senija, Benissa y el propio Xaló.
«La cooperativa de Xaló representa a muchos pequeños propietarios y representa su unión, permitiendo con su trabajo aportar unos ingresos muy importantes para la economía de mucha gente», destaca el actual presidente de Bodegas Xaló, José Juan Reus.
Para Reus las cooperativas son una parte imprescindible en la industria agroalimentaria. «Tradicionalmente han sido las empresas más grandes del sector», explica Reus, quien destaca que el caso de la cooperativa que el preside es bien distinta: «En nuestra zona la propiedad está muy repartida y la cooperativa representa esa unión de pequeños propietarios».
La importancia del enoturismo
las Bodegas Xaló son un sitio de peregrinación en el norte de la provincia para los amantes del vino. La cooperativa oferta un tour en el que se pueden conocer de primera mano las instalaciones y el proceso de elaboración de estos caldos.
A ello se le suma la oportunidad de una sesión de cata de vinos con cuatro tipos distintos y una mistela o vermouth. Junto a ellos se disfruta una selección de embutidos y quesos de la zona.
Se trata de una práctica cada vez más solicitada. El turismo gastronómico se ha convertido en uno de los puntales de la provincia, que saca punta de sus productos autóctonos y la calidad que ellos desprenden.
«Lo más característico de nuestros vinos es que se elaboran con dos variedades autóctonas muy poco conocidas en el resto de España», explica Reus. «Por un lado tenemos una variedad de uva tinta, la Giró, y por otro lado, y más conocido, la Moscatel de Alejandría», reseña el presidente de la cooperativa.
Para Reus la moscatel de la Marina Alta «es diferente a los demás por su cercanía al mar». El agricultor resalta su «riqueza aromática particular», lo que dota a los vinos de Bodegas Xaló de «una frescura y aromas muy particulares y únicos», como es el caso del Bahía de Dénia, uno de sus más famosos y de carácter seco y dulce a la cabeza.
Vendimia 2025
A pesar de su robustez en el tiempo, las bodegas también han tenido que hacer frente a las inclemencias meteorológicas características de la provincia de Alicante. La continua sequía ha puesto en jaque al sector vitícola.
Innovación en un negocio tradicional
Innovar en un negocio tradicional no es fácil. «Para nosotros significa por un lado trabajar para que la calidad de la uva sea óptima», explica José Juan Reus, quien asegura que «esto no es fácil ya que hay que convencer al pequeño agricultor que lo más importante es la calidad que la cantidad y que la uva solo entra a la bodega si reúne unos requisitos de calidad».
Pero para el presidente de la cooperativa innovar también es «trabajar en nuevos desarrollos comerciales, en nuestro caso trabajando en aumentar por una lado la exportación y por el otro abriendo nuevos mercados en nuestro país».
La tercera pata de la innovación, según indica el propio Reus, es «incorporar a la cooperativa las últimas tecnologías tanto para la elaboración de los vinos como para su distribución, y por supuesto un muy importante trabajo en publicidad en muy diferentes ámbitos y soportes».
José Juan Reus, también presidente de la Denominación de Origen Protegida (DOP) de Vinos de Alicante, ha asegurado que «ya llevamos años duros como consecuencia de la sequía«, pero ha aprovechado para «agradecer el trabajo de los socios este año».
Se trata de una campaña en la que se han recolectado alrededor de un millón de kilos entre la uva moscatel y la uva Giró, que cuenta «con buena graduación y muy buena calidad», explica Reus, quien asegura que los vinos de este año «tendrán una calidad sobresaliente».