Puig contrarresta las críticas de Podemos celebrando el 3 de marzo el 'Día de la Empresa'

Una vela a Dios y otra al diablo, aunque en este caso no se sepa quién es quién. Por un lado, el presidente de la Generalitat, Ximo Puig asiste a la asamblea de la Asociación Valenciana de Empresarios (AVE) y se reúne con la Confederación Empresarial de la Comunitat Valenciana (CEV) para declarar el día 3 de marzo como Día de la Empresa.

Por otra, el vicepresidente segundo, Héctor Illueca, asegura que el acto de AVE supone «un intento anómalo de reforzar el protagonismo de los empresarios en la vida democrática», así como de «ocultar debates prohibidos y el papel de los trabajadores en la sociedad».

Estas dos almas coexisten en el Consell y durarán hasta las elecciones, para las que ya quedan menos de 100 días. Cada uno ofrece un perfil diferente: Ximo Puig es el presidente centrado, ponderado y dialogante con todos, empresarios y trabajadores. «La empresa es el operador fundamental en la actividad económica. Junto a los trabajadores, hacen posible que la economía funcione.», ha subrayado tras reunirse con Salvador Navarro, de CEV.

Podemos, por contra, es el rebelde. Es una estrategia política como cualquier otra para distanciarse de su socio en el Consell y marcar perfil propio para las elecciones. No en vano, las palabras de Illueca llegaron después de semanas en las que varios cargos de Podemos, encabezados por la ministra de Derechos Sociales, Ione Belarra, vienen cargando contra los grandes empresarios por la subida del precio de los alimentos, apuntando a algunos como el presidente de Mercadona, el valenciano Juan Roig.

El también conseller de Vivienda se ha reiterado este posicionamiento advirtiendo que «se están produciendo abusos en los precios que aplastan a los productores, al mundo rural y a formas de vida tradicionales con prácticas monopolistas».

Puig le enmienda la plana cada vez que puede. Ya sea en el propio acto de AVE («Caricaturizar al empresario como el ricachón del Monopoly es injusto y falaz») o al asegurar, como este jueves, que la Generalitat «está al lado» del empresariado.

La actitud del presidente convence a los empresarios. Así, Salvador Navarro ha agradecido al presidente de la Generalitat que aceptase la propuesta de la CEV de instaurar este día, que coincide con la fecha de constitución de la Confederación Empresarial.

Estos cruces de declaraciones no parecen afectar la convivencia del Botànic, que apura sus últimos días antes de someterse al escritunio de las elecciones. Por eso, Illueca ha insistido en que se siente «absolutamente cómodo de formar parte de un gobierno con voluntad de diálogo permanente» porque siente que debe su cargo a su partido y a la gente que le votó, por quienes se ve apoyado «en esta y otras manifestaciones».

Temas

• Consell
• Ximo Puig