
Pablo López, CEO de Silbon: “Queremos seguir siendo una empresa reconocida por hacer las cosas bien”.
Mantener la esencia cercana y familiar a pesar del crecimiento, ofrecer calidad a precio razonable y ganarse la confianza de los clientes: las claves del éxito de Silbon.
Tres mil euros y un piso con 30 americanas. Así fue el modesto arranque de Silbon, la firma de moda cordobesa que ahora tiene tiendas en las calles más importantes de España, París, Portugal y México. Pablo López, CEO y cofundador de la marca, lleva la moda en los genes: su abuelo paterno fue sastre y su padre le inculcó la pasión. Hoy nos habla del presente y el futuro de una firma que ofrece calidad, personalidad, elegancia y sostenibilidad a sus clientes como sello de identidad.
Silbon nace en 2010 en Córdoba. ¿Cómo surge la idea y cuál fue el primer gran reto al que te enfrentaste?
Siempre me gustó mucho la moda, mi abuelo paterno fue sastre y gracias a mi padre es como descubrí mi pasión. El primer reto fue arrancar el proyecto con solo tres mil euros, empezamos en un piso con 30 americanas.
Silbon se define por valores como la elegancia y la normalidad. ¿Cómo se logra trasladar esos atributos a cada colección?
El primero apostando de verdad por la elegancia y siendo fieles a lo que nos ha traído hasta aquí, en Silbon el vestir elegante no se negocia. Y la normalidad expresándonos como somos, siendo fieles a nosotros mismos.
La mayoría de vuestros tejidos son de lana natural y apostáis por la fabricación en cercanía. ¿Cómo influye este compromiso en la calidad y en la percepción de la marca?
Sin duda positivamente, cada día hay un consumidor más informado y más exigente, que no sólo quiere ropa de calidad sino que quiere identificarse con una empresa por su manera de hacer las cosas. En Silbon desde el inicio hemos apostado fuerte por dar una calidad a un precio razonable.
“En Silbon desde el inicio hemos apostado fuerte por dar una calidad a un precio razonable”. Pablo López, CEO de Silbon.
Silbon no es solo moda, también compromiso. ¿Qué puedes contar del Bosque Silbon y del proyecto Second Life?
El bosque es un proyecto muy bonito, estamos financiando la reforestación de 12 hectáreas en Córdoba en colaboración con la Diputación. Y Second Life es un proyecto ambicioso, para mí es el mejor sistema del mercado para darle una segunda vida a la ropa, hay miles de prendas al año que pasan de unos clientes a otros sin apenas coste para ellos.


¿Cómo ha sido la respuesta del cliente ante la recompra de prendas?
Muy positiva, cada vez se usa más, la ropa de Silbon por regla general no la sueles usar hasta romperla, si la cuidas bien pues devolverla y conseguir saldo para comprar ropa nueva u otra prenda de segunda mano, se trata de consumir y usar la ropa de manera responsable.
¿Crees que el sector de la moda se toma la sostenibilidad en serio o todavía queda mucho por hacer?
Creo que cada vez nos lo tomamos más en serio, pero que hace falta regulación. En nuestro caso va en nuestro ADN, y pensamos que quien no lo haga en unos años estará fuera porque la sociedad lo va a exigir.
La marca apuesta por la sastrería a medida. ¿Cómo ha sido la acogida de ese servicio?
Muy bueno, ahora cumple siete años con una demanda creciente a doble dígito. El año pasado incorporamos la opción exprés por la que puedes tener un traje personalizado en un mes y este año hemos incluido la camisería a medida que también ha arrancado con buen pie.

Silbon Bar presenta un nuevo concepto que fusiona moda y gastronomía. ¿Cómo surgió la idea? ¿Qué aporta a la identidad de la marca?
Es una apuesta diferenciadora, muy pocas marcas en el mundo tienen un restaurante o un bar donde disfrutar de los mejores momentos del día dentro del universo de tu marca favorita, y Silbon es una de ellas. Creemos que aporta alegría y nos permite tener un espacio donde organizar eventos para promocionar nuestro estilo de vida.
Hablando de novedades: Silbon ha impulsado un nuevo proyecto de formación en FP. ¿Cuál es el objetivo y qué impacto esperáis en el sector?
Viene a cubrir una necesidad y a atender una demanda. La necesidad es nuestra de mano de obra cualificada, en nuestro sector hay un déficit de formación muy alto, no todo el mundo sabe vender, y el vendedor tiene una importancia vital, es el delantero que mete los goles, si la pelota no entra no hay nada que celebrar. Y la demanda es de los jóvenes, el sector de la moda les atrae, muchos tienen sueños parecidos a los míos, en este curso no sólo les vamos a enseñar a vender, le vamos a dar una visión 360 grados del sector de la moda.
Silbon ha crecido manteniendo su esencia cercana y familiar. ¿Cómo influye este valor en vuestra relación con el cliente?
Esto es muy complicado, es uno de los grandes retos de la firma, seguir cercanos a pesar del crecimiento. Yo siempre se lo digo a los equipos comerciales, no penséis en vender, pensar en ganaros la confianza de la gente, la venta llega después de la confianza.
“Uno de los grandes retos de la firma es seguir cercanos a pesar del crecimiento”. Pablo López, CEO de Silbon.
Las tiendas físicas siguen siendo un pilar clave para Silbon. ¿Qué importancia tienen frente al canal online?
Son el 75% de nuestras ventas, con ese dato te lo digo todo, pero también sabemos que ambos canales dependen mucho el uno del otro.
La tienda física es el templo de la marca donde vivir una experiencia especial, y la web es la opción más práctica que poco a poco le va ganando terreno al canal físico en línea con los hábitos actuales.
Silbon tiene una fuerte presencia en Andalucía y crece en Madrid. ¿Qué estrategias estáis desarrollando para aumentar vuestra notoriedad en otras provincias?
Estamos atacando las zonas geográficas por distintas vías, donde la marca no es muy conocida, estamos apostando por tiendas pequeñas con nuestros bestseller, corners dentro de El Corte Inglés, presencia en puntos de venta multimarca consolidados y vía marketing digital. A esto le unimos tiendas de referencia en las calles más importantes de España, que le dan a la imagen de marca un plus, el año pasado abrimos en Serrano y este año abriremos en Rambla de Cataluña.
¿Qué tal ha sido la acogida internacional de Silbon? Además de París, Portugal y México, ¿a qué otros lugares te gustaría llevar la marca?
El internacional no es nada fácil, a París fuimos solos hace 8 años y es un proyecto que nos ha dado muchos quebraderos de cabeza pero también mucho aprendizaje, a día de hoy por fin hacemos balance positivo. Para este año hay proyectos muy bonitos, abrimos canal wholesale en Portugal, Andorra, y en la T4. También estamos trabajando para pisar acelerador en Latam en 2026 donde sabemos que hay muchas ganas de Silbon.
¿Dónde te gustaría ver a Silbon en los próximos 5 años?
Liderando la moda preppy en España con nuestro concepto de elegancia actualizada, teniendo más peso de ventas en la línea de mujer y con una presencia internacional en mercados importantes. Y por supuesto siendo una empresa reconocida por hacer las cosas bien con responsabilidad siendo fieles a nuestros orígenes.