De Estados Unidos a tu mesa: el viaje de las pipas de girasol

Un gran número de las pipas de girasol que se consumen en España proceden de Estados Unidos, gracias a la labor de la Asociación Americana del Girasol (Pipas USA). Con el reto de satisfacer los gustos de los consumidores españoles, los productores no han cesado en la investigación y han desarrollado más de 20 tipos de pipas de girasol diferentes.

Estados Unidos se ha convertido en la cuna por excelencia de uno de los snacks preferidos por los españoles: las pipas de girasol. Algo como mínimo sorprendente, porque los americanos no tienen la costumbre de pasar largas jornadas al aire libre o comentando el día con los amigos, con la bolsa de pipas en mano. Y es que se podría afirmar que este fruto seco sí forma parte de la cultura española. ¿Quién no ha disfrutado de una maratón de series con sus amigas devorando pipas? ¿Quién no ha perdido los nervios en un partido de su equipo favorito mientras pelaba pipas? Muchos de los planes de ocio en nuestro país van, irremediablemente, asociados a este alimento. 

Las semillas de girasol son sabrosas y saludables: proporcionan la cantidad diaria recomendada de magnesio y fósforo. Se trata de un “tentempié” rápido y sencillo, que además ayuda al sistema inmunitario y tiene un alto contenido en vitamina E y fibra.

Aunque las pipas son originarias de América del Norte, y tienen miles de años, actualmente España es uno de los países importadores con mayor fuerza. El año pasado, por ejemplo, aumentó en un 80% -en comparación con 2016- su importación de pipas de girasol. Según datos de Eurostat y del Departamento de Agricultura de la Embajada Americana en España, España importó durante el año pasado 242.214 toneladas métricas de semillas de girasol. La realidad es que estas cifras no son una novedad, sino que confirman una tendencia que hace años que se observa.

Francia, Bulgaria y Rumanía son los tres principales países europeos que abastecen a España de este sabroso snack. Fuera de la zona comunitaria, Estados Unidos sigue siendo uno de los continentes clave: ostenta una cuota de mercado del 14% entre los países no europeos exportadores de pipas de girasol a España.

Investigaciones para dar con la pipa de girasol perfecta

Diversos estudios se centran en analizar los gustos de los consumidores españoles, un aspecto clave en las estrategias de distribución de organizaciones ya consolidadas como la Asociación Americana del Girasol -conocida en España como Pipas USA-, que defiende los intereses de los productores y agricultores de girasol estadounidenses y es responsable de la exportación a nuestro país de toda la producción de pipas de girasol estadounidense para que posteriormente los fabricantes españoles las tuesten y las envasen.

Hoy día, los consumidores ya no solo buscan una pipa grande por fuera, sino que ahora quieren mayor consistencia. Es decir, que el fruto que esconde la cáscara de la pipa tenga un gran tamaño. Y los fabricantes y distribuidores deben reaccionar ante esta tendencia. Por eso, para dar respuesta a estas nuevas demandas, la industria americana no cesa en sus investigaciones y, por el momento, ha desarrollado ya hasta 20 tipos de pipa de girasol diferentes. Una tarea ardua, ya que para obtener una nueva variedad de pipa se requiere un programa de híbridos y unos siete años de trabajo. En el laboratorio se controla todo sobre este snack, desde el tamaño hasta el sabor. Y de aquí, sale la mejor semilla de girasol. 

Actualmente, la mayoría de las pipas de girasol se cultiva en California, Colorado, Kansas, Minnesota, Nebraska, Dakota del Norte, Dakota del Sur y Texas. Estas tierras son capaces de cubrir la alta demanda del mercado español.  De hecho, para continuar con esta estrecha relación entre ambos mercados, siete de estos estados estadounidenses aumentaron, el año pasado, la superficie de plantación de este cultivo en comparación con el año anterior. 

La Asociación Americana del Girasol recuerda, además, que todas estas semillas cultivadas en diversos estados americanos como Dakota del Norte, Dakota del Sur o Kansas, entre otros, son “cuidadosamente elegidas y procesadas siguiendo los mayores estándares de calidad para satisfacer las necesidades del consumidor español, que valora la alta calidad, sabor y gran tamaño de las semillas de girasol estadounidenses, junto a sus bajos precios y atributos saludables”.